Por si fuese poco, no se puede dejar de mencionar que el Cal Pep está posicionado en el número 31 en la lista de “Los 50 mejores restaurantes del mundo”.
Es el penúltimo restaurante del ya mencionado Grupo Isabella’s. Gala propone un viaje al pasado surrealista de la Barcelona de inicios del siglo XX, tiovivo o tarot incluido. Gala es ese lugar en el que disfrutar de una cocina mediterránea y cosmopolita para comer o cenar (mención especial recibe su sushi9 pero también donde tomar el té en el patio alrededor de la fuente o copas por la noche con ambiente bien guapo y música hasta tarde. Es el último "location to be" del postureo barcelonés.
La mini parrilla de carne fue toda una sorpresa, deliciosa pero sin dudas me devoraría hasta dos. Font del Tort es otro de los restaurantes masía de los alrededores de Barcelona que tiene gran popularidad entre las celebraciones de bodas, por la atención y el entorno.
Aquí practica una cocina catalana de autor muy related a la de ahí, basada en la excelencia del producto y la pureza de los sabores. Se abastecen de la huerta y fauna del Maresme y del Baix Llobregat en la medida de lo posible.
No. Se qué me había pasado o porque deje de ir a este restaurante mexicano que ópera de una forma diferente i peculiar desde principios del siglo, lo digo porque es de los pocos lugares que a través de los años sigue ahí, he tenido la oportunidad de remembrar esas noches de cena y la verdad entiendo porque sigue funcionando, esos nachos hechos desde 0, nada de bolsitas y ese guacamole que me recuerdan mis viajes a México, su pastor y cochinita mmm , que sólo son superados por sus margaritas heladas y sus postres caseros, con una presentación como sí te lo acabara de servir tu abuela. Digno a contemplar
Hace poco descubrí en el centro de BCN el restaurante Ferran y me pareció estupendo para disfrutar de una buena comida de toda la vida, todo se ve fresco y de primera calidad (me effectsó que tenían pescado fresco en la barra para que puedas ver el producto antes de que te lo sirvan elaborado).
Platos donde manda una tensión de contrastes que dispara el sabor. Como una navaja –cocida y cruda, con su propio pil-pil– restaurantes de Barcelona con gàrum, flor de cilantro y guisantes del Maresme, donde la frescura herbácea frena el mar salvaje de la garota, o unos extraordinarios postres de helado de leche ahumada.
Van poder agafar la monumental antiga La Vaqueria, amb aquells salons enormes i foscos, ara plens de llum i d'un disseny clàssic i confortable.
Hace poco descubrí en el centro de BCN el restaurante Ferran y me pareció estupendo para disfrutar de una buena comida de toda la vida, todo se ve fresco y de primera calidad (me affectó que 10ían pescado fresco en la barra para que puedas ver el producto antes de que te lo sirvan elaborado).
El restaurante del coqueto lodge Casa Bonay es un templo del vino normal y del buen producto presentado sin grandes disfraces. Tres o cuatro ingredientes por plato brillan en un carta breve y cambiante en la que la temporada manda. Recetas de corte muy regional con algunas pinceladas internacionales son protagonistas.
Lleva la cocina el chef Robert Gelonch, un cocinero elegante, técnico y creativo. Es uno de esos chefs que opina que menos es más, y lo certifica una trayectoria de diez años con casa propia –Gelonch, pionero de la fusión culinaria en Barcelona– y seis años como jefe de I+D de Grupo Iglesias. Al frente de Rias/Kru sobresale en el producto desnudo pero con mucha imaginación y 'punch'.
Zafra va passar de comandar una cuina amb dues taules –l’exquisit Estimar, al Born– a tenir el timó d’un pailebot de luxe. Amb el mateix equip que Estimar, Zafra segueix apostant pel millor producte del mar, però amb tots els recursos de l’resort.
Este es uno de nuestros bares de tapas favoritos. Situado a tiro de piedra del Museo Picasso, en la pintoresca calle de Montcada, el Bar del Pla ofrece tapas, raciones y platos del día que te quitarán las ganas de hacer dieta en 5 segundos.
Just after studying the place to try to eat the best pizza in Barcelona, it absolutely was an easy choice for us to take a crack from eating tapas to take in in a garage rather. But not only any garage. Parking Pizza converted this individual garage into a significant pizzeria.